Es la tarea más básica en el mantenimiento de las redes de alcantarillado. Con ella se trata de recuperar la sección original de la tubería, evitando obstáculos que podrían producir retenciones, atascos y malos olores.
Es necesario proceder periódicamente a una limpieza con camiones de agua a presión. Los sistemas más habituales son los que utilizan impulsión de agua para desprender los residuos, combinados con sistemas de vacío para retirar dichos residuos desde los pozos de registro